Lactancia Mixta: Todo lo que debes saber
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La lactancia mixta es alimentar tu bebé con lactancia materna y al mismo tiempo con leche de formula.
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Aunque sabemos que la lactancia materna es lo más recomendado para el bebé, existen algunos casos o circunstancias especiales que impiden llevarla a cabo al 100%. Puede ser el caso de nacimientos prematuros, bebés que rechazan el pecho, madres con problemas de mastitis, madres con horarios laborales difíciles, entre otros...
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Esto puede llevarnos a elegir la lactancia mixta, pues afortunadamente hoy en día existen sustitutos de leche materna que permiten alimentar a los bebés con total confianza.
Si queremos seguir dando pecho hay que tener mucho cuidado a la hora de introducir la leche de formula, ya que se corre el riesgo de que el bebé prefiera este tipo de lactancia porque le cuesta menos trabajo mamar y queda satisfecho más rápido.
Hay dos formas de llevar a cabo la lactancia mixta:
Alternando tomas. El bebé tomará en ocasiones solo leche materna y en otras solo biberón. Esta situación es frecuente en mujeres que deben compatibilizar su vida laboral con ser madres.
Suplementando tomas. En este caso siempre se le dará primero el pecho al niño y a continuación se complementará la toma con un biberón. Esta situación suele producirse cuando el bebé no queda satisfecho o no consigue succionar suficiente leche.
La lactancia mixta puede dar paso de forma progresiva, a la leche de formula. Es una forma menos brusca de producir el cambio en la alimentación del bebé y se mantiene la lactancia materna el mayor tiempo posible para aprovechar todos sus beneficios tanto para la madre como para el bebé.
Recuerda que: lo más recomendable para el bebé, es que tome leche materna exclusiva hasta los 6 meses de edad y que, si algo no va bien se busque ayuda adecuada. Si esto no es posible, siempre será mejor lactancia mixta que lactancia artificial exclusiva.
Esto puede llevarnos a elegir la lactancia mixta, pues afortunadamente hoy en día existen sustitutos de leche materna que permiten alimentar a los bebés con total confianza.
Si queremos seguir dando pecho hay que tener mucho cuidado a la hora de introducir la leche de formula, ya que se corre el riesgo de que el bebé prefiera este tipo de lactancia porque le cuesta menos trabajo mamar y queda satisfecho más rápido.
Hay dos formas de llevar a cabo la lactancia mixta:
Alternando tomas. El bebé tomará en ocasiones solo leche materna y en otras solo biberón. Esta situación es frecuente en mujeres que deben compatibilizar su vida laboral con ser madres.
Suplementando tomas. En este caso siempre se le dará primero el pecho al niño y a continuación se complementará la toma con un biberón. Esta situación suele producirse cuando el bebé no queda satisfecho o no consigue succionar suficiente leche.
La lactancia mixta puede dar paso de forma progresiva, a la leche de formula. Es una forma menos brusca de producir el cambio en la alimentación del bebé y se mantiene la lactancia materna el mayor tiempo posible para aprovechar todos sus beneficios tanto para la madre como para el bebé.
Recuerda que: lo más recomendable para el bebé, es que tome leche materna exclusiva hasta los 6 meses de edad y que, si algo no va bien se busque ayuda adecuada. Si esto no es posible, siempre será mejor lactancia mixta que lactancia artificial exclusiva.